Podemos plantearnos los siguientes puntos a la hora de analizar la necesidad, el contexto y los recursos disponibles, por norma general, el formador online realiza su actividad o bien para un proveedor de formación o institución educativa, o bien para una organización cliente.
Este check list aplica en ambos casos, ya sea asumiendo algunas de ellas de forma directa, o bien, en coordinación los equipos de apoyos de las organizaciones con las que colabora.
- Imagen. Hay una imagen clara sobre lo que pasa. Se han definido 3 palabras claves que resuman lo que hay que hacer. Se sabe si la situación o el reto se han generado por factores internos o externos.
- Modelo de eLearning. Hay una definición explícita y común de qué es eLearning. Existe la actitud adecuada para lanzar una formación online. Hay un modelo de aprendizaje explícito. Está claro la integración del curso/proyecto con otras acciones presenciales/online.
- Who is Who. Hay una tabla para mapear quién es quién en la organización.
- Personas interesadas. Se sabe quiénes son los patrocinadores de la iniciativa y cuáles son sus intereses. Se conocen las barreras y los facilitadores. Se tiene identificado de forma clara la visión y el camino para entusiasmar y hacer parte a los involucrados.
- Identificar los factores clave de la solución a crear. Se han identificado al menos 5 variables afectan directamente al éxito del curso/iniciativa.
- Infraestructura humana. Se cuenta con las personas y procesos adecuados para garantizar la viabilidad operativa. Se ha creado el protocolo y guía de coordinador de formación online.
- Infraestructura tecnológica. Se cuenta con las plataformas, herramientas y repositorios digitales necesarios. Se cuenta con un presupuesto para soportar la infraestructura requerida para la formación online.
- Se ha creado un listado de recursos digitales con definición, características, costes y proveedores. Se pueden reutilizar fuentes o contenidos de otros cursos/proyectos. Existe un sistema de indexación de contenidos. Se ha creado la guía del autor.
- Cultura y modelo de aprendizaje. Se han documentado las experiencias de éxito. Se sabe cómo se aprende en esta organización. Qué ha funcionado y qué no.
- Participantes. Se ha analizado el punto de participación e identificado apoyos necesarios. Se comprobó si hay algún rol o grupo que requiera un itinerario especial o unos ejemplos concretos y su dispersión geográfica. Se conoce el volumen de participantes que hay que formar. Los participantes cuentan con dispositivos para realizar formación online.
- Objetivos. Se han definidos los objetivos realistas del proyecto/curso/iniciativa orientados a materializar la formación. Se han definido los KPI con los que se medirá el impacto en la organización.